ITALIA: Venezia81, Creatividad en la era de la IA: del crédito fiscal al cine, la primera señal del compromiso de MiC para proteger a los artistas

Si, por un lado, la plena conciencia del potencial del uso de la Inteligencia Artificial en el proceso de creación de obras sigue siendo una premisa ampliamente compartida, por otro lado, es necesario intervenir para proteger el ingenio y el talento de los artistas a la luz de la rápida evolución de las tecnologías. Para el Ministerio de Cultura, reafirmar la centralidad de la creatividad humana sobre la máquina es la dirección a seguir, para garantizar la preservación del inmenso patrimonio cultural de nuestro país y su imparable crecimiento en el futuro.

El análisis de las oportunidades y riesgos del uso de la Inteligencia Artificial en el ámbito artístico y cultural con vistas al equilibrio ha sido el eje del encuentro que ha tenido lugar esta mañana en el Pabellón de Italia -coordinado por MiC y Cinecittà- en el Hotel Excelsior del Lido de Venecia, un evento promovido por la Dirección General de Cine y Audiovisual del MiC en el marco del 81º Festival Internacional de Cine de Venecia.

"El ingenio y las decisiones del hombre por encima de todas las máquinas y un uso de las nuevas tecnologías como la Inteligencia Artificial que sea siempre consciente, transparente y responsable", dijo la subsecretaria de Cultura, Lucía Borgonzoni. "Es en torno a estos principios en torno a los que se está desarrollando el trabajo que estamos llevando a cabo desde el Ministerio, y que ha encontrado su primera aplicación innovadora en el sector cinematográfico y audiovisual, a partir de la introducción de las nuevas reglas en los esquemas de financiación pública dedicados al sector, como el crédito fiscal. Me refiero a la norma que establece que los costes relacionados con el uso de la inteligencia artificial relacionados con las interpretaciones creativas y artísticas quedan excluidos de los costes subvencionables, sin perjuicio del uso de la inteligencia artificial atribuible a efectos especiales relacionados con la partida «actores principales». Siguiendo con el tema del crédito fiscal por producción, pienso también en la obligación de declarar en los créditos de apertura o cierre las partes de la obra, es decir, las etapas de tramitación de la obra, para las que se ha utilizado la inteligencia artificial o el hecho de que se establezca que las empresas están obligadas a prever en los contratos firmados con los autores, intérpretes y albaceas de la obra, una cláusula que permite a estos últimos no consentir, respectivamente, la explotación de su trabajo o de su imagen o rendimiento profesional por parte de sistemas de inteligencia artificial. Medidas que confirman -concluye el Senador- lo fundamental que es para nosotros reafirmar con todas las herramientas a nuestro alcance la centralidad de las obras y del trabajo intelectual y creativo de nuestros artistas".

"La inteligencia artificial es, sin duda, la próxima frontera del cine y, en algunos casos, ya es una parte integral del proceso de producción. Su uso supone una gran oportunidad para el sistema, pero no está exento de riesgos. En la reforma del sistema de contribuciones públicas, en particular del crédito fiscal, hemos trabajado para limitar estos riesgos, con miras a la máxima transparencia", agregó Nicola Borrelli, director general de Cine y Audiovisual del MiC.

Luego hay otro aspecto a tener en cuenta cuando se trata del uso de la Inteligencia Artificial en el sector cultural y creativo e involucra al público de manera más directa. Cualquier contenido producido parcial o totalmente por IA debe ser claramente reconocible por los usuarios desde una perspectiva de poder blando.

El padre Benanti, presidente de la Comisión de Inteligencia Artificial para la Información del Departamento de Información y Publicaciones de la Presidencia del Consejo de Ministros, que intervino en la reunión, dijo: "El uso de la IA dentro de un sector como el cine puede cambiar radicalmente la forma en que entendemos la influencia cultural como herramienta de geopolítica. De hecho, el poder blando ahora se confía no solo al ingenio humano, sino también a la capacidad y omnipresencia de la máquina. El riesgo es principalmente que la IA se quede concentrada en unas pocas manos, con el riesgo de crear nuevos grandes productores y atractores de poder blando capaces de influir en la opinión pública mundial".

Moderado por Andrea Appella, miembro de la CTS del Centro Sperimentale Cinema, así como por la subsecretaria Lucia Borgonzoni, el director Nicola Borrelli y el padre Benanti, el panel también contó con la participación de Giacomo Lasorella, Presidente de AGCOM, Salvatore Sica, Presidente del Comité Consultivo Permanente de Derechos de Autor, Salvo Nastasi, Presidente de SIAE, Francesco Rutelli, presidente de ANICA, Gianluca Curti, presidente de CNA Audiovisual, Francesco Martinotti, presidente de ANAC Autori Cinema, el productor Riccardo Tozzi y Damien Viel, director digital y de marketing de Banijay Group.